jueves, 17 de abril de 2008

Humo...humo... humo...

Ahora... ya que iban a prender fuego miles de hectáreas, y contaminarnos a todos y todo, podrían haberle puesto a los pastos un poco de incienso o algo así para que por lo menos oliera bien, no?
No puedo respirar más...
Tengo las mucosas nasales secas, como si se me hubiese metido el Sahara adentro, estoy pensando en aspirarme una soda a ver si con eso afloja un poco el ardor, porque realmente tengo miedo de que se me seque el cerebro, más teniendo en cuenta que no es muy grande.,
Lo que sí, todas estas cosas me van a dar tema para charla cuando sea vieja.
"Te acordas Martita cuando vino el Tsunami??"
O... "Yo me acuerdo que una vez la ciudad se llenó de humo"....
"Y cuando nevó en Buenos Aires??? allá por el 2007"
En realidad lo más probable es que quede todo en el olvido, como debe ser.
Igualmente me la paso coleccionando momentos en mi memoria para algún día poder usarlos. Debe ser que estoy cansada de escuchar las mismas anecdotas de los viejos una y otra vez. Si voy a ser vieja voy a ser una vieja bien preparada, llena de historias interesantes. Y sino apelaré, como hacía mi abuela, a la imaginación e invetaré historias donde los caballos me hablan y cosas así.

domingo, 13 de abril de 2008

Una vez fui a la cancha

Me están saliendo las muelas de juicio...
No es justo.
Yo admito que soy hipocondríaca, pero esto me excede.
La cadera, las muelas, el otoño... es demasiado.
Todo atenta contra mi animo, que venía bárbaro, hasta que detonó.
No quiero quedar como una gruñona pero es la verdad...
Hoy, Domingo, la tele no acompaña, pero tanto fútbol me hizo acordar uno de los temas de los que quería escribir, el mismísimo Fútbol.
Mi relación con este deporte es muy superficial.
Soy de esas que no lo soporta, pero si ve un partido se compenetra e hincha las pelotas, ni hablar si es el mundial. Me convierto en DT, Referí, juez de linea, hincha y hasta en Maradona si me dejan.
Igual odio el sonido del fútbol, no me gustan los tipos futboleros, no me meto con nadie, pero no soporto tragarme un domingo mirando la tribuna de la cancha por tv (porque ni siquiera ven el juego, si lo quieren tienen que pagar no sé cuanta plata más, una locura).
Para mi lo peor no es el deporte en sí, sino lo que viene después, todos esos "filósofos futbolisticos" que hablan de un juego como si se tratara de algo vital... patético, no se ofendan.
(Y eso del periodismo deportivo? qué onda?. Es una gran farsa... a ver cuando la vemos a Catalina Dlugui poniendo una escuela de periodismo de espectáculos... Por Favor!)
Sigamos...
Soy de Racing, no por convicción, sino por Capusotto que así me bautizó y así me quedaré.
Mi viejo en su vida vio un partido, y menos que menos nos llevó a la cancha y esas cosas que hacen los padres.
En casa las únicas pelotas que habían eran las lamparitas de la luz, hasta que mi hermano creció un poco y le empezó a gustar el fútbol y se hizo hincha de un equipo, pero por suerte es mi hermano y no me lo tengo que bancar.
Más allá de que me guste o no, siempre quise ir a la cancha, para ver que se sentía, porque entré un par de veces a estadios, pero siempre vacíos.
Después de muchas promesas, hechas y no cumplidas, por diferentes personas, hace un par de domingos debuté futbolisticamente y fui, por fin a la cancha.
Me divertí mucho.
En realidad fui a ver un partido de la "J"... o no se que clase... pero eran "Defensores de Salto" Vs. "El Linqueño", de Linconl.
Me pareció que el campo de juego, aunque tiene las mismas medidas que uno de primera división, es más chico de lo que yo me imaginaba, y los jugadores más grandes de lo que se ven en la tele... por supuesto...
El primer tiempo lo vimos desde atrás del arco del linqueño.
Yo fui con "hinchas" de Defensores... los locales. Ahí sentí la tensión del gol, del arquero, todo el juego....
Me pareció muy gracioso el tema de las hinchadas... los bombos, cornetas, canciones super elaboradas... cuanto amor, cuanto tiempo invertido.
Todo el tiempo me sentí como en montaje, como si nada fuera real, como si todos estuviesen actuando.
El segundo tiempo fue mejor.
Me senté en unas gradas y compartí las emociones de la hinchada local.
Escuché los insultos más terribles y los más graciosos.
Enfermaron al arquero, al arbitro, el juez de línea, y hasta a los jugadores de su propio equipo.
Gente grande, hombres de campo, mujeres, viejitas!, todos entusiastas puteadores.
Las puteadas clásicas no las voy a repetir, pero me reí mucho con frases como "arquero, cara de delincuente" "ponete corpiño juez de linea" "tu mamá coge" "tu mama te cagó" y la mejor "Referí, nunca pensé que fueras tan mala persona"... nunca escuche un insulto tan personalizado...
Fue una tarde muy amena.
Todo muy tranquilo, sin golpes, gente violenta, ni barrabravas.
Ganó defensores 2 a 0 y los de Linconl se fueron a casa tristes.
Nosotros fuimos a comprar facturas y de vuelta a la casa, como si nada, pero con una experiencia más. Chiquita, humilde, pueblerina, pero con eso me alcanza para poder decir que algún día fui a la cancha.

N.A: espero no ofender a nadie con mi relato, y si lo hago les pido disculpas. Si algún estudiante de periodismo me quiere putear puede hacerlo con total confianza, de hecho si alguno de mis amigos estudiantes de periodismo me quiere putear, no tenga reparos, me lo merezco por mala persona. No es que subestime su capacidad de estudio o inteligencia, es que creo que es una carrera inventada, pero yo no soy dueña de la verdad, es solo una humilde opinión.
Espero no ganar muchos enemigos con esto...
Saludos!

sábado, 12 de abril de 2008

Aca tá!

Volví...
En realidad nadie sabe que me fui, pero yo sí.
Me fui por un par de días y por esas cosas de la vida se hicieron un par de docenas de días.
Volví renovada, con mucho para escribir, pero con un dolor de cadera y huesos que me muero, así que puedo estar sentada frente a la pc por cortos lapsos de tiempo, lo que me dificulta un poco el desarrollo la creatividad, porque si no fuera dispersa como soy todavía... pero no puedo decir la tabla del seis sin colgarme en el medio y acordarme de otra cosa... que no es nada ahora, pero cuando iba a la secundaria se me hacía cuesta arriba matemáticas.
En concreto, si no escribo de una me sale cualquier cosa y la idea principal se esfuma como el humo de un cigarro... (por ejemplo ahora, que me están hablando mientras escribo y encima tengo sueño porque no pude dormir por el dolor de cadera por que el bebé ya esta pesado y menos me puedo concentrar en lo que escribo.... estoy muy dispersa... uy, un pajarito).
Bueno, después les voy a escribir algunas cosas, quizás de noche que es cuando no hay nadie hablandome ni tengo a Valen dando vueltas alrededor mio...
Saludos!